Presuntos criminales abatidos por militares y la Fuerza Civil de Nuevo León serían del Cártel del Noreste

Este martes, un operativo de seguridad en el municipio de Hualahuises, Nuevo León, culminó con la muerte de tres civiles presuntamente armados, tras un enfrentamiento con fuerzas federales y estatales.

En un comunicado oficial, el Gobierno de Nuevo León informó que, gracias a tareas de investigación, las autoridades localizaron la presencia de un grupo de civiles armados en la zona citrícola de Hualahuises. Ante esta situación, se desplegó un operativo coordinado con efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional, Fuerza Civil de Nuevo León, y las Fiscalías estatal y federal.

Al llegar al lugar, las fuerzas de seguridad fueron recibidas con disparos, lo que derivó en un intercambio de fuego. Tres hombres resultaron heridos en el enfrentamiento y más tarde se confirmó su fallecimiento. En la zona se aseguraron tres armas, un vehículo y equipo táctico, y las autoridades aseguraron que el área está bajo control y no representa peligro para la población, ya que el enfrentamiento tuvo lugar en una zona deshabitada.

Presunta conexión con el Cártel del Noreste

Fuentes extraoficiales sugieren que los abatidos podrían pertenecer al Cártel del Noreste, aunque hasta ahora no hay confirmación oficial de las autoridades. La región ha sido escenario de varios enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y grupos armados, incluidos incidentes el pasado 13 de septiembre en Montemorelos, Allende, Linares y General Terán, donde se sospechaba la participación de integrantes del mismo cártel.

Además del Cártel del Noreste, el Cártel del Golfo también disputa el control de esta área estratégica en la frontera entre Nuevo León y Tamaulipas. Otros grupos, como los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG), han intentado establecerse en la región, aunque su avance se ha visto limitado por la resistencia de «Los Chukys», brazo armado del Cártel del Noreste que se ha expandido hacia el sur, llegando hasta las cercanías de Monterrey.

Las autoridades continúan trabajando para reforzar la seguridad en la región y reducir la violencia que afecta a las zonas rurales del estado.